Mostrando las entradas con la etiqueta Portzamparc. Mostrar todas las entradas
Mostrando las entradas con la etiqueta Portzamparc. Mostrar todas las entradas

05 febrero, 2009

PORTZAMPARC: CIDADE DA MUSICA, RÍO


En colaboración con el Arq. José Alonso Oviedo Lira*

En el corazón de Barra de Tijuca, un suburbio en las afueras de Río de Janeiro, se encuentra una de las obras más vanguardistas y polémicas de Christian de Portzamparc, la Ciudad de la Música o Cidade da Musica (para diferenciarla de la premiada Citè de la Musique que el mismo autor produjera en París).


Si bien la versión carioca comparte elementos comunes en su lenguaje como el manejo de elementos escultóricos y paredes curvas, la incorporación de espacios urbanos interiores y su integración simbólica con el entorno, que es básicamente un parque (La Villette de Bernard Tschumi en París y un jardín de Fernando Chancel en Río), hay diferencias conceptuales y formales importantes, y la versión carioca se diferencia de la parisina en que la primera se halla sobre una gran plataforma que se encuentra "levitando" 10 metros sobre el área verde.

Imágenes cortesía de Atelier Portzamparc

Efectivamente, la composición está basada en dos grandes plataformas horizontales que "atrapan" los volúmenes curvos y son perforadas por espacios vacíos que permiten un interesante juego espacial. Al respecto, menciona Portzamparc:
"Entre el mar y la montaña este proyecto constituye un gran hito en el centro de la planicie de Barra da Tijuca. Una terraza pública elevada 10 metros y colgando de un jardín tropical, permite a los visitantes a aprehender el magnífico paisaje antes de llegar a los varios salones. El principal salón de conciertos expresa el mismo espíritu que aquellos en Paris y Luxemburgo. El diseño escénico redescubre los elementos del teatro Isabelino, los músicos rodeados por la audiencia."
Imágenes cortesía de Atelier Portzamparc

El programa de este complejo musical de 95000 m2, el más grande de América Latina cuando se concluya, incluye una Sala de Conciertos Filarmónicos para 1800 espectadores (convertible en una Sala de Ópera para 1300), una Sala para Música de Cámara (500 espectadores), una sala electroacústica con 180 asientos, 2 salas de cine de 150 asientos cada uno y otro cine más de 300 asientos, cuartos de ensayo, restaurante, biblioteca, tiendas, estacionamientos y la sede de la Orquesta Sinfónica de Brasil.


El proyecto, iniciado el 2002, e inaugurado el 2008 pero el nuevo alcaldo ha detenido las obras restantes por investigación en una presunta malversación de fondos.

Hasta allí llegó mi amigo, el arquitecto José Alonso Oviedo, gentil colaborador de este blog, quien nos comparte sus impresiones:

Hace poco tuve la suerte de visitar Río de Janeiro, -una de las ciudades más bellas del mundo a criterio de muchos-, entiendo al recorrerla, que debe ser por el contraste de un escenario natural impresionante y el esfuerzo del hombre por habitarlo organizadamente lo que ha generado sitios y escenarios urbanos y naturales memorables.
En mi rápida exploración, que fue además urbana y vial, recorriendo la ruta de la autopista Linha Amarela que fue concebida por el urbanista griego Doxiadis en 1965 como parte del plan vial de RJ (cada vía troncal tenía un color), inicialmente muy criticado por ser "un extranjero" pero luego apreciado por su visión, recién pudo ser construida hace no más de 12 años por concesión de una iniciativa de inversión privada.



Fue para mí una sorpresa al recorrer la vía de norte a sur y luego de atravesar varios túneles hacia el mar encontrar un edificio como remate visual de baja escala (no mas de 25m de altura) adentro de un gran intercambio vial de alta velocidad con una forma de cuadrado de 500 x 500m girado a 45º en su intersección con la Av. Das Américas que comunica el histórico litoral central de RJ con la zona de Barra Tijuca (nuevo enclave de clase media alta en el litoral oeste de RJ).
A pesar del contraste que ofrecen varios edificios alineados al mar de 20 a 40 pisos, el edificio es notorio por la amplitud de su espacio de emplazamiento en la mitad de ese intercambio, la otra parte es ocupada por un terminal de transporte terrestre. A comparación con el amigable contacto de los edificios, las vías y la naturaleza en esta ciudad, este desarrollo urbano es más próximo a la escala del clásico urbanismo moderno de otras ciudades recientes de Brasil.

En la volumetría del edificio que se aprende con rapidez por la velocidad de no menos de 50kmh del recorrido perimetral, se destaca como una constante su plano horizontal elevado, y los segmentos de muros curvos ofrecen rápidos contrastes transversales.

Fotos cortesía de J.A. Oviedo

Al enterarme gracias a mis amigos ingenieros de que se trata de una "Ciudad de la Música" rápidamente evocó la de París y descubro que en efecto es una obra del arquitecto Portzamparc, y la comparación se hace inevitable.

Este edificio ha recibido por los locales más críticas que admiración: por su alto presupuesto público de más de US$ 200 mill, es inaccesible peatonalmente, no será fácilmente utilizado por la mayoría de los cariocas de clase media y baja (que aman el Bossa Nova y la Samba) pues la zona es un lugar exclusivo accesible solo en auto (media hora con la nueva autopista, y hora y media en transporte público que solo llega por el litoral); además el programa solo comprende escenarios para música de cámara y sede para la Sinfónica de Río de Janeiro.


Paradójicamente, me comentaron que hace poco cerca de los depósitos del puerto de la bahía de Guanábara, una de las zonas populosas y deprimidas de la ciudad se había organizado un agrupamiento de grandes galpones para albergar el trabajo de meses de las Escuelas de Samba en sus carros alegóricos, disfraces y coreografías para evitar conflictos en los barrios y favelas por la tradicional rivalidad y espionajes, sitio que se ha denominado popularmente...."la ciudad de la música".


Por ello al margen del interesante ejercicio arquitectónico, de tratar de crear un nuevo icono que semeja más una gran escultura de bajo perfil adentro de un intercambio vial de escala metropolitana que busca destacar en medio de grandes edificios, y del ambicioso programa encomendado por el anterior alcalde de generar un sitio al servicio de la música clásica internacional (válido para otras grandes ciudades occidentales recientes); considero que el reto de Portzamparc será grande en tratar de convencer al nuevo alcalde opositor de continuar la obra tal como se concibió inicialmente (la cual ha sido paralizada), pues Río de Janeiro no es una cuidad cualquiera, es conocida y visitada por todo el mundo además de sus valores urbanos y naturales por la fuerte tradición de su carnaval, máxima expresión de la música popular de Brasil "la Samba" lo que sí ameritaría mayor homenaje; entonces además de sus merecimientos arquitectónicos las dificultades del proyecto no solo son su "ubicación urbana", sino su "ubicación cultural"; sin embargo como en toda gran obra, la perspectiva del tiempo nos dará la justa medida de su trascendencia.


Añadiría al comentario del arquitecto Oviedo que parecen haber diferencias conceptuales importantes entre ambos proyectos. La Citè de la Musique en París es por concepto un proyecto popular, la idea de atraer la música a las masas, un lugar donde estudiantes de música, músicos y público en general comparten distintos niveles de aproximación al cuarto arte. Es muy diferente a la Ópera de París, diseñada por Charles Garnier, obra maestra del neobarroco.

Creo que es positivo que las ciudades apuesten por la difusión de música selecta, pero creo que es importante que la hagan accesible al público. Sídney, Pekín y Singapur han apostado a sus respectivas óperas como símbolos de la ciudad (y de modernidad nacional) pero se han preocupado de colocarlas en lugares prominentes y fácilmente accesibles por la población, en hacerlos parte importante del paisaje urbano y de insertarlos en la memoria colectiva de la gente. Aún así, espero que los cariocas resuelvan sus problemas, que inauguren su ciudad de la música y que la hagan asequible a toda la gente y a todos los ritmos, y que pronto pueda escucharse ahí a Caetano Veloso cantando Fina Estampa.



Presionar aquí para ver un detallado video de la concepción arquitectónica del edificio, realizado por el Atelier Portzamparc…



… y este otro que explica sus cualidades estructurales




VER TAMBIÉN

- OTRAS OBRAS DE CHRISTIAN DE PORTZAMPARC
- ÓPERA, SALAS DE CONCIERTOS, TEATRO

* El Arquitecto José Alonso Oviedo Lira es urbanista, egresado de la Universidad Nacional de San Agustín de Arequipa, Perú y ha cursado estudios de maestría en Dirección y Gerencia de Empresas Constructoras e Inmobiliarias, en la Pontificia Universidad Católica del Perú en convenio con la Politécnica de Madrid. Actualmente viene desarrollando proyectos en la Gerencia de Promoción de la Inversión Privada de la Municipalidad de Lima.

31 enero, 2009

PORTZAMPARC: LA CITÈ DE LA MUSIQUE, PARÍS


Esta pluralidad, esta riqueza que está al principio de toda “Ciudad” viva fue para mí, desde el principio de la concepción del proyecto, una visión fundadora y se convirtió a continuación en un concepto funcional. Trabajar por entidades… Eso pareció ser el único medio de administrar la disparidad de los usuarios.

Christian de Portzamparc


La Ciudad de la Música (la Citè de la Musique) en París, es una de las obras más representativas del reconocido arquitecto francés Christian de Portzamparc. Hago la acotación de que en este post reseñaré el complejo parisino, ya que recientemente se viene construyendo otra Ciudad de la Música (Cidade da Musica) en Río de Janeiro, por el mismo autor, y que trataremos en el próximo post.



Aunque nacido en Casablanca, Marruecos (1944), donde su padre militar estuvo destacado por un tiempo durante la Segunda Guerra Mundial, los orígenes, estudios y trayectoria de Christian de Portzamparc se han dado en París. En 1990 obtuvo el Grand Prix d’Architecture y en 1994 se convertiría en el primer arquitecto francés en obtener el prestigioso premio Pritzker. El Atelier Portzamparc tiene diversas obras en Europa, Medio Oriente, Asia, Norte y Sudamérica (en este moleskine hemos reseñado su controversial participación en el complejo Nexus World de Fukuoka)

Su obra, por el uso generoso del color y de formas escultóricas y ornamentales ha sido llamada frecuentemente postmodernista (aunque no historicista). Sin embargo, el enfoque de Portzamparc es mucho más reflexivo y no simplemente dejarse llevar por una corriente. En palabras de la crítica Ada Louise Huxtable (una de los jurados del Pritzker) “la alegría de su arquitectura deja muy atrás la rigidez del moderno y la caricaturesca decoración del post-moderno”


El propio Portzamparc acota
¿La forma sigue la función o a al inversa, demandará que se enfrenten geometrías inusuales? De la escala del lugar a la de los espacios interiores, creo que la forma responde tanto al lugar como a la función

Así, su trabajo busca insertarse en el contexto no mediante la repetición de códigos formales históricos, sino mediante relaciones espaciales urbanas, la integración del exterior con el espacio interior y la recuperación de valores tradicionales como la calle y la plaza, las que incorpora a sus propuestas como espacios interiores urbanos.


ANTECEDENTES

En 1984 François Mitterrand pensó en revitalizar el barrio obrero del norte de París, anteriormente deprimido y construir un complejo dedicado a la música en un terreno disponible en el Parque de La Villette, dado que el Conservatorio Nacional de Música necesitaba una ampliación. Para ello se convocó a un concurso internacional adjudicado a Portzamparc, cuya propuesta se culminó 10 años después.

Evolución de la propuesta


UBICACIÓN Y EMPLAZAMIENTO

La Citè de la Musique se ubica en el extremo sur del Parque de la Villette. El extenso programa se divide en dos partes, dos complejos que convergen en una plaza frente a le Grande Halle. Ambos complejos comparten conceptos comunes, como la inclusión de calles o plazas como elementos organizadores de los mismos, pero son formalmente muy diferenciados. El ala este, de forma triangular, organiza las actividades más dinámicas y extrovertidas. El ala oeste tiene una planta cuadrada, es más serena e introvertida.


Portzamparc toma el concepto de las folies que Bernard Tschumi planteara como elemento unificador del parque y los incorpora en la propia Ciudad de la Música.

A. Arte lírico B. Órgano C. Danza D. Estudios E. Claustro F. Alojamiento de estudiantes. G. Galería del parque. H. Agua. I. Jardín. J. Teatro actual. K. Sala de conciertos y anexos. L. Instituto Pedagógico Musical. M. Alojamiento de estudiantes. N. Sede del Ensemble Intercontemporain. O. Ensayos. P. Anfiteatro. Q. Centro de Intrumentos Musicales. R. Pabellón de Enero.

Nótese el tratamiento de la plaza en forma radial y cómo se utiliza la diagonal como un elemento que otorga un fuerte dinamismo a la composición.

En el siguiente video Potzamparc explica la relación de la plaza con el edificio:



PORTZAMPARC: ...pero que se abre hacia el parque.
Yo creo que abriendo esta diagonal y esta abertura, disminuye un poco este eje tan fuerte, añadiendo otro eje más dinámico que se abre.

COMENTARISTA: La fragmentación en islotes, característica de la arquitectura realizada por Portzamparc, no contradice la fluidez de las líneas y el sonido indiscreto formados por la decoración de las fachadas.

PORTZAMPARC: Hubiera podido ser un gran paralelepípedo con varios pisos, corredores y bloques (o cajas). Aquí al contrario, son pedazos alejados (dispersados); entonces los hice mover un poco, alargándolos ligeramente o cambiándoles un poco la forma sin que ese conjunto se mueva.
(agradezco la traducción, cortesía de la srta. Lorena Zolezzi)




EL ALA ORIENTAL

Es tal vez el área más icónica de la Citè de la Musique, por ser también la más escultórica. Su planta triangular encierra un elemento elíptico (sala de conciertos) y es surcada por una circulación en caracol que lo envuelve.



Esta composición dícese haber sido inspirada en las conchas marinas, símbolo del sonido y usadas como instrumento musical por muchas culturas en la antigüedad. Urbanamente, funciona como una calle que organiza los espacios del complejo, la cual es iluminada cenitalmente.


Este es uno de los elementos que encontré más interesantes durante mi visita, la reproducción de un espacio urbano laberíntico reminiscente de la antigua París medieval pero utilizando un lenguaje contemporáneo (sin mencionar el cálido refugio en el ventoso y frío día de invierno en que me tocó visitar el parque). La circulación es sin embargo, un poco confusa, por los quiebres que se genera entre esta gran calle helicoidal y otras menores. Se cuenta, como anécdota, que los músicos tardaron 2 semanas en aprender a desenvolverse entre las distintas partes del edificio.



Dice Portzamparc:
Es un estilo arquitectónico que está en movimiento, que no se puede aprehender de un solo vistazo, y es justamente en esta experiencia del movimiento, de su duración, de sus secuencias, de sus rupturas y de sus descubrimientos, donde la arquitectura coincide con la experiencia musical. En este caso, la arquitectura es un arte del movimiento y está hecha de sonidos.



Otro aspecto que me llamó mucho la atención fue el ingreso. En él Portzamparc toma el concepto de la folie y le añade una marquesina, definida for dos cerchas en forma de cuña, que vuela varios metros, dándole un carácter indiscutible de entrada al conjunto. Pero además de definir el ingreso, se establece una circulación y un importante eje de composición del conjunto, coincidente con la grilla de 120 m definida como elemento generatriz del parque.




En el ala este se ubica una sala de conciertos, un rectángulo dentro de una elipse de suelo plano para poder instalar el escenario en cualquier parte de la sala. Es un espacio modulable de 800 a 1200 plazas, El techo, de 15 metros de altura, comprende cuatro plateas periféricas.

Sección de la sala de conciertos

Contiene además un anfiteatro de 230 plazas, una sala de ensayos y vestuarios, más una videoteca interactiva y un centro de documentación, un laboratorio de restauración de instrumentos, las oficinas del Instituto de Pedagogía de la Música y la Danza y la Sede del Ensemble Inter-Contemporain. Tiene además un café restaurante y alojamientos para 82 alumnos del conservatorio nacional. El Museo de la Música, de 2800 m2 también está en el lado oriental. 5.000 libros, enciclopedias,tesis universitarias y catálogos de museo, una colección de 15.000 fotografías, documentos sobre los instrumentos de la colección del museo y sus fabricantes, y sobre el trabajo de coleccionar instrumentos.


En el museo se presentaba una muestra dedicada a John Lennon

EL ALA OCCIDENTAL

Al oeste se ubica el segundo grupo de edificios dispuestos en una conformación cuadrada. y donde se ubica el conservatorio. Es, en principio, mucho más racional y sosegada que su contraparte oriental, con circulaciones claras y edificios claramente organizados al rededor de un patio central donde se ubica una forma cónica truncada.

Otro aspecto llamativo es la forma de la cobertura, una lámina ondulada ubicada en la fachada oeste del conjunto y que contrasta con la serenidad de las líneas de los edificios que corona.


Recientemente, la Citè de la Musique ha sido ampliada, especialmente en el museo, donde se han incorporado numerosos instrumentos musicales. La nutrida concurrencia del público a este complejo y su influencia en diversas obras al rededor del mundo es una muestra de su vigencia a pesar del tiempo.


VER TAMBIÉN

- OTRAS OBRAS DE CHRISTIAN DE PORTZAMPARC
- PARQUES TEMÁTICOS
- ÓPERA, SALAS DE CONCIERTOS, TEATRO
- JOHN LENNON