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05 octubre, 2011

KENZO TANGE: GIMNASIO NACIONAL DE YOYOGI, TOKIO.

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El Gimnasio Nacional de Yoyogi en Tokio, construido para las olimpiadas de 1964, es la obra más conocida del maestro japonés Kenzo Tange, y la que lo catapultara a la fama internacional y al premio Pritzker. Su diseño aerodinámico, monumental y sugerente se convirtió en un icono de la capital japonesa y un referente dentro de la corriente denominada metabolismo, marcando una distancia del movimiento moderno internacional. Cuando se completó el Gimnasio mayor tenía la cobertura suspendida más larga del mundo.


El complejo consta de dos gimnasios, y ambos edificios sobresalen no sólo por la calidad estética de sus estructuras y la innovación formal de su diseño, sino por la tecnología empleada, en un país constantemente sacudido por fuertes vientos y terremotos.


ANTECEDENTES

Luego de la derrota en la Segunda Guerra Mundial en 1945 y durante la ocupación norteamericana encabezada por MacArthur, Japón quedó devastado. El mundo se sorprendería cuando a menos de 20 años de lanzadas las bombas atómicas, Japón organizaba en Tokio las Olimpiadas de 1964. Más impresionado quedaría aún con la extraordinaria calidad de su infraestructura deportiva, encabezada por este Parque Olímpico diseñado por Kenzo Tange.


Tange (1913-2005 ) fue una legendaria figura de la arquitectura moderna japonesa. Influenciado por Le Corbusier, era un maestro en el empleo del concreto armado, material con el que ha desarrollado numerosas obras. Sus proyectos urbanísticos, como el Plan de reconstrucción de Hiroshima o el plan de Ampliación de Tokio le han valido reconocimiento internacional, obteniendo numerosos premios, entre ellos el prestigioso Pritzker.

EMPLAZAMIENTO


Ubicado en el distrito Shibuya, el complejo se llama oficialmente Gimnasio Nacional Yoyogi, en honor al parque del mismo nombre donde se encuentra. Frente a él se ubica una extensa área verde que alberga el importante santuario sintoista dedicado al emperador Meiji.


Muy cerca también se encuentra la estación de Harajuku, donde suelen encontrarse algunos japoneses vestidos de forma estrafalaria.


El conjunto principal se halla compuesto por dos gimnasios de peculiares cubiertas dispuestos en una plataforma diseñada paisajísticamente. De hecho, a pesar de su tamaño monumental, diera la impresión de que las coberturas nacieran del mismo parque, enfatizando su relación con el entorno circundante.


CONCEPTUALIZACIÓN

Los elegantes coberturas de los dos gimnasios, utilizan un lenguaje contemporáneo y una lógica estructural similar, ya que están suspendidas en tensores de acero. Ambos ejes se organizan en este-oeste, que es también la dirección predominante del terreno.

Planimetría general del conjunto

EL GIMNASIO PRINCIPAL


Con una capacidad para 10,000 personas, el gimnasio principal acomoda eventos de natación, pero puede albergar también juegos de básquet y hockey.

El espacio se organiza distribuyendo las tribunas simétricamente al norte y al sur, enfatizando el eje este-oeste tanto en la dirección del techo como en la ubicación de las entradas.

Planta del Gimnasio principal

Estructura


El concepto estructural se basa en una espina principal compuesta por dos cables de acero de 13" de diámetro, anclados a dos grandes placas de concreto, ubicadas a ambos extremos del edificio, y a dos columnas de concreto centrales. Los cables describen una curva parabólica (técnicamente, se llama catenaria), de la cual nacen cables menores perpendiculares para formar un techo como si fuera una tienda de lona.

Detalle del sistema estructural del Gimnasio Mayor. Maqueta en la exhibición ARCHI-NEERING, del Congreso Mundial de Arquitectura en Tokio 2011


Los techos de las tribunas, al tener una curvatura distinta a la de los cables, permiten la generación de la elegante y grácil cobertura, cuya superficie, cóncava y convexa a la vez, es siempre distinta desde cualquier ángulo donde se la vea (una mezcla de parábola e hipérbole, otra vez técnicamente, se denomina paraboloide hiperbólico. Tange ya había utilizado esta forma en el monumento de La Silla de Montar en el Parque de la Paz, en Hiroshima).Esquema estructural del techo
Detalle del anclaje de los dos cables de acero.

Fachada

Kenzo Tange aprovecha el desfase de la geometrías de la catenaria y la tribuna para establecer los imponentes accesos triangulares, los que, a pesar de tener una escala monumental, parecen nacer del suelo, dándole al edificio una sensación de ligereza. Ambos accesos son precedidos por explanadas o plazoletas, que se distinguen del resto del parque mediante un atrio con graderías.


Otro detalle que resta pesadez visual al coloso es el grácil volado que describen las tribunas y que da la sensación de que el edificio quisiera levitar. Las tribunas son también rítmicamente perforadas para alojar los vanos.

Detalle del ala lateral del gimnasio. Al fondo se ve el edificio de Roppongi Hills.

El ritmo es aplicado también en el ingreso, donde la estructura metálica en forma de V de diferente tamaño es expuesta de forma dinámica y dramática.


Es también importante recalcar que la cobertura, si bien utilizó principios de tecnología vanguardista para la época, a la vez evocan elementos de la arquitectura tradicional japonesa, particularmente los techos de los santuarios sintoístas. De hecho, el primer edificio de Tange a sus 29 años fue un memorial que representaba al santuario de Ise.

Detalle de las columnas extremas del gimnasio. Curiosamente, había estado en el Santuario principal de Ise hacía una semana. La referencia fue inevitable.

Tange utiliza concreto visto, metal y acero, materiales predilectos en el brutalismo de mediados de los 60, y explota la versatilidad de éstos para lograr formas dinámicas y esculturales.


Interior

Tange aprovecha el espacio ojival entre ambas catenarias para ubicar un gran pozo de iluminación cenital, que añade un efecto dramático al interior del espacio. Tange utilizó un sistema similar en su Catedral de Tokio.


Detalles


EL GIMNASIO MENOR


Tiene una capacidad para 5,300 espectadores y es usado para deportes menores. El espacio se organiza en torno a dos círculos no concéntricos, de manera que unas tribunas resultan más amplias que las opuestas. A diferencia del gimnasio mayor, éste tiene solo una columna estructural y una sola entrada.


En su interesante "Atlas de arquitectura, volumen 1", Werner Müller y Gunther Vogel hacen el siguiente análisis:


En planta, el círculo interior de la pista (1) está descentrado con respecto al círculo formado por las gradas de los espectadores (2), lo que da lugar a la forma de concha que adquieren éstas y a la curva dinámica ascendente de las gradas frente a la entrada. El anillo de distribución exterior está, a su vez, ligeramente desplazado en dirección contraria, ensanchándose progresivamente hacia la entrada (como la abertura de una concha de caracol), en virtud de la prolongación del anillo del estribo (8,9,10) hasta el bloque de contrafuerte. La diferencia en el trazado de los círculos en planta responde a los movimientos del público, tanto en las aglomeraciones a la entrada y la salida como en su reparto en las gradas.
Fachada

Se accede al gimnasio mediante una placita que lo antecede, con un pequeño estanque estilo japonés. El detalle de extender la cobertura hasta nacer del piso es similar al gesto utilizado en el otro gimnasio.


Para el Gimnasio menor, el maestro japonés utiliza el mismo principio, sólo que en lugar de usar dos placas de concreto, usa una sola, como si fuera un gigantesco mástil.


Dos vistas del mástil.


El techo se concibe desenrollándose a manera de caracol, que culmina en una aguda proa. Sobre la cobertura, Müller y Vogel acotan:

La cobertura está construida como una estructura laminar, siguiendo un principio análogo al de la malla de cables con bordes rígidos. El borde está constituido por un anillo de estribos a lo largo del borde exterior del recinto, y que se divide en dos vigas curvas, una superior (8) y otra inferior (9) unidas puntualmente por estribos individuales (7). En lugar de los cables de acero previstos en un principio, forma la estructura un conjunto de vigas colgantes (6) tendidas entre los estribos del anillo exterior y un tubo de acero (5) que se eleva en espiral. Este se tiende -en lugar del cable principal-, formando la cumbrera de la cubierta colgante, desde el gran bloque que actúa como contrafuerte (4) en el extremo exterior de la entrada principal, describiendo una curva, en un principio suave pero que después se eleva en perpendicular, hasta el alto pilono (3), ligado subterráneamente al contrafuerte por un muro de hormigón. Entre las vigas colgantes se disponen diagonalmente a intervalos regulares las viguetas de anclaje de acero, sobre las que reposa la parte exterior de la cubierta, compuesta por placas de acero de 4-5 mm de espesor. El comportamiento estático de este tipo de construcción requiere una lámina.

Detalle del sistema estructural del Gimnasio Menor. Maqueta en la exhibición ARCHI-NEERING, del Congreso Mundial de Arquitectura en Tokio 2011

Detalles.


VER TAMBIÉN:
- OTRAS OBRAS DE KENZO TANGE.
- COMPLEJOS DEPORTIVOS
El Gimnasio de Yoyogi fue el primer edificio que visité durante mi primera visita a Tokio. Era un día muy lluvioso, asumo ahora que se trataba de un tifón, pero no me importó. Quedé sobrecogido por la monumentalidad del diseño y por su cuidadosa ejecución y estado de conservación. Me impresionó mucho pues sólo lo había visto antes en unas pequeñas fotos, en algún rincón de los libros de historia de la arquitectura moderna.
Hoy he vuelto al Yoyogi 8 años después (felizmente en un día soleado) y aún me impresiona. Tras haber visto algo más de Japón que aquella primera vez, he podido entenderlo un poco mejor, y por eso he querido compartir mis impresiones con Ud. en este re-post.

19 octubre, 2010

KENZO TANGE Y LA EXPO 1970, OSAKA.

La Torre del Sol, por Taro Okamoto, el símbolo de la Expo '70

En 1970 se celebró en Osaka, Japón la que sería no solamente la primera Exposición Universal en Asia, sino también el más concurrido de estos eventos en la historia, con más de 64 millones de asistentes (aunque yo intuyo que la Expo de Shanghai puede arrebatarle el título).

El proyecto urbano de la Expo de Osaka recayó en el reconocido arquitecto japonés Kenzo Tange, quien había recibido importantes encargos como la reconstrucción y el Parque de la Paz en Hiroshima y el equipamiento deportivo para las Olimpiadas celebradas en Tokio en 1964.

CONTEXTO

El lema de la Expo era "Progreso y Armonía para la Humanidad". Era un bonito lema, pero además muy necesario considerando el convulsionado clima de la región: la guerra en Vietnam, bombardeos americanos en Camboya, los roces y tensiones entre China y Taiwan, India y Pakistán, etc., hacían de Asia una región muy inestable. Sin embargo, a los anfitriones no les faltaban razones para sentirse entusiastas: a 25 años del fin de la Segunda Guerra Mundial Japón no sólo se había recuperado, sino que lideraba un crecimiento económico impresionante.

Una camioneta especialmente diseñada para la Expo '70
Micrófonos inalámbricos, celulares y cámaras polaroid, algunos de los inventos que asombraron a los asistentes.

Algunos adelantos tecnológicos expuestos en este evento fueron la cámara polaroid, el primer IMAX, experimentos con trenes magnéticos y teléfonos celulares. La Cápsula del Tiempo, donada por la Matsushita Electric Industrial Company (más conocida como Panasonic) contenía una serie de logros de la civilización y estaba concebida para durar 5,000 años. Sin embargo la atracción más concurrida la tuvo el pabellón norteamericano: una roca lunar.


Moda de la época.

Mobiliario: es realmente extraño sentarse en la mano de alguien.

UBICACIÓN

La Exposición se llevó a cabo en Suita, un suburbio de Osaka, ocupando un terreno de 330 hectáreas sobre el que anteriormente se extendía un campo de bambú. Especiales obras de infraestructura se realizaron para conectar a la ciudad con el área del evento.


ORGANIZACIÓN

Debido a la forma del terreno Kange y su equipo de arquitectos organizaron la exposición ebasándose en dos tramas, una paralela a la avenida principal de conexión y la otra girada 45 grados.Perpendicular a la avenida se ubicó el ingreso en torno a una plaza cubierta, llamada "La Gran Cubierta".



Esta estructura metálica espacial permaneció en este lugar hasta 1979.



En el centro de la plaza se hallaba la Torre del Sol, una escultura monumental creada por el escultor Taro Okamoto, y que presenta diferentes representaciones del sol en cada una de sus caras.


Con sus 70 m de altura la torre sobrepasaba el techo de la cobertura, extendiéndose sus brazos hasta 25 m. Este es un efecto un poco extraño, da la impresión de que el arquitecto o el escultor se equivocaron y hubo que hacerle un hueco al techo para acomodar al coloso. Para otros, sin embargo, la Torre del Sol aparece tan poderosa que se extiende más allá de la cobertura.


Durante la exposición estaba abierta al público, que podía acceder a ella mediante escaleras. Originalmente también se hallaban en la Expo otras dos esculturas de Okamoto, posteriormente retiradas: la Torre de la Madre y la Torre de la Juventud.

Detalle del tope de la escultura.

ALGUNOS PABELLONES
En la exposición se ubicaron 32 pabellones internacionales y 32 de otras organizaciones, incluyendo agencias gubernamentales y empresas privadas niponas. Puede verse claramente tres tendencias entre los arquitectos de la exposición: el optar por una arquitectura tradicional o ecléctica (como algunos países del sudeste asiático o incluso algunas corporaciones japonesas), el lenguaje moderno racional (como el pabellón de China, Inglaterra o el que ahora acoge el museo de la Expo), y el lenguaje moderno de vanguardia, haciendo uso de alardes estructurales o formales, en algunos casos escultóricos y hasta poco menos que estrambóticos. Mención aparte merecen los metabolistas locales, que encontraron aquí una plataforma ideal para difundir sus ideas.

Pabellón de Corea del Sur.
Pabellón de la República Popular China, en esa época bajo Mao Zedong.
Pabellón de Telecomunicaciones.
Como diría mi amigo Martín, galería de sombreros para todos los gustos
Racional propuesta británica.
Enorme pabellón norteamericano
Pabellón australiano

Pabellón del acero.
Popular propuesta suiza.
Canadá.
Pabellón de México (diseñado por el maestro Agustín Hernández), Holanda, el pabellón conjunto de Irán, Pakistán y Turquía y finalmente, el pabellón de Grecia.

Pabellones corporativos: el moderno de Suntory contrasta con el tradicional de Sanyo.
Madagascar.

Hay también un museo conmemorativo de la Expo, cuya forma moderna, sus columnas metálicas exteriores y sus líneas simples me hizo recordar inevitablemente a la Nueva Galería Nacional en Berlín, obra de Mies van der Rohe.


Exterior e interior del Museo de la Expo

LUEGO DE LA EXPO

Los pabellones de la Expo fueron derribados y el espacio fue reciclado como un parque conmemorativo que incluye vegetación, lagos, escultura moderna, temas culturales y juegos temáticos.

Durante la Expo, luego de su demolición y tras su transformación en parque.
Actualmente, el museo Nacional de Etnología, diseño de Kisho Kurokawa.
La antigua sede administrativa de la Expo, hoy en día la sede de la Compañía de Gas, diseñada por Koichiro Nezu.
Al caminar, uno puede ver las fotos de los pabellones que antes se ubicaban en ese emplazamiento, es casi la sensación de estar recorriendo un parque arqueológico moderno.

Uno de los pabellones preservados es esta "Casa de Descanso", por Itsuro Yoshiba.

La Torre del Sol, paradójicamente deteriorada por la radiación solar, estuvo a punto de ser demolida, pero fue restaurada en 1995. Su presencia es mucho más imponente sin la cobertura metálica, de la cual sólo queda un ejemplo en una plaza colindante.


El Parque conmemorativo de la Expo 70, a 40 años de su inauguración, sigue siendo un área muy concurrida y un rol protagónico en la vida recreacional y cultural de la ciudad.

VER TAMBIÉN
- EXPOSICIONES UNIVERSALES

En el Parque de la Expo aparece también, de vez en cuando, algún payaso.

Y, claro, siempre hay alguien dispuesto a seguirle la payasada.