"No queremos olvidar que el Parlamento Escocés estará en Edinburgo, pero pertenecerá a Escocia, a la tierra Escocesa. El Parlamento deberá ser capaz de reflejar la tierra que representa. El edificio debe levantarse desde la empinada base del Arthur's Seat y llegar a la ciudad casi surgiendo de la roca".
Enric Miralles
El Parlamento Escocés es la última y más grande obra del arquitecto catalán Enric Miralles. Complejo, abstracto, rico en simbolismo y calidad espacial y al mismo tiempo controversial, el Parlamento se yergue como símbolo de indentidad escocesa, de su historia, su cultura, su paisaje y su gente.
ANTECEDENTES HISTÓRICOS
Históricamente Escocia ha luchado por su autonomía e independiencia. Ni los ejércitos romanos ni las hordas vikingas pudieron dominarlos y resistieron estoicamente a la dominación inglesa de Eduardo I el Zanquilargo (todos recordamos a William Wallace, inmortalizado por Mel Gibson en el históricamente impreciso Braveheart). Pero en 1707, cuando el rey Jaime VI de Escocia se convirtió en Jaime I de Inglaterra ambos países se unieron, quedando disuelto el parlamento escocés. Reprimido largamente por los ingleses, el nuevo Parlamento Escocés fue autorizado recién en 1997.
EL SITIO
Edimburgo, la capital escocesa, es una cautivante ciudad asentada en gentiles colinas, declarada Patrimonio de la Humanidad por UNESCO. El Parlamento se emplaza en un terreno al norte del emblemático Parque Holyrood, un área de reserva dominada por colinas volcánicas del Arthur's Seat y los Peñascos de Salisbury. Se encuentra al final de la llamada "Milla Real" (Royal Mile), una avenida que conecta un rosario de joyas arquitectónicas, que se inicia en el Palacio de Holyrood (que se ubica justo frente al Parlamento) y en cuyo otro extremo culmina en el imponente Castillo de Edinburgo.
El terreno, que era propiedad de una cervecería, ocupa un área de 1.6 ha, donde se encontraba la Queensberry House (una histórica mansión que sirvió de hospital, barraca del ejército, refugio y hospital geriátrico) y es una zona además rodeada por construcciones de influencia holandesa, con su típica fachada escalonada.
EL CONCURSO
En 1998 se llevó a cabo un concurso internacional de ideas, en el que participaron figuras como Richard Meir, Rafael Viñoly y Micheal Wildford entre otros. Pero a diferencia de ellos, que presentaron propuestas muy definidas y en algunos casos monumentales, el equipo presidido por el español Enric Miralles (junto a su esposa Benedetta Tagliabue y la firma escocesa RMJM) presentaron un conjunto de esquemas abstractos muy simbólicos en los que se concebía al Parlamento como una hoja y sus ramitas.
Esto despertó el interés del jurado que la proclamó como propuesta ganadora, una propuesta muy abstracta que ni la prensa ni el público entendieron. Sin embargo, el jurado, especialmente Donald Dewar, se mantuvo firme, pues, tal como decía Miralles, "el Parlamento se asienta en la tierra... Escocia es una tierra, no una serie de ciudades.... la tierra en sí será un material, un material físico de construcción".
LA PROPUESTA
La práctica de Enric Miralles de ir improvisando conforme la construcción iba evolucionando marcó una diferencia notable en el estilo de trabajo de sus socios RMJM, que si bien ocasionó múltiples fricciones, a la larga dio como resultado un producto rico en originalidad y calidad espacial, aunque significó un incremento notable en los costos.
Numerosas referencias simbólicas se encuentran en diversos elementos del edificio, desde el planteamiento general hasta los detalles de los asientos de la Cámara Legislativa. Pueden encontrarse también referencias a Charles R. Mackintosh e incluso al propio Gaudí, con quien Miralles compartió mucho más que la ciudadanía.
Miralles basó su propuesta en tres aspectos fundamentales: el paisaje escosés, su gente y su cultura. Precisamente, el complejo reinterpreta el paisaje y se yergue como una pequeña ciudadela, tectónicamente definida por intricadas calles y edificios que, sin tener un patrón geométrico clásico que los ordene, cambian de escala y parecen efectivamente salir de la tierra, asemejando un paisaje medieval o, como Miralles prefiere comparar, un monasterio. Es pues una suma de partes interrelacionadas que definen un todo, una escenográfica secuencia de recorrido que permite experimentar y descubrir sensaciones mientras se la atraviesa.
Básicamente la mayor densidad del conjunto se manifiesta en "torres" que asientan hacia la ciudad, mientras jardines y terrazas se desparraman hacia la formación volcánica del Arthur´s Seat. Los edificios se organizan en dos grupos: una L que encierra parcialmente un grupo de edificios dispersos cuya composición parece fragmentarse.
La L está conformada por tres edificios, que definen un componente más o menos ortogonal enfrentado a la ciudad. Comenzamos por el más regular de ellos, la mansión Queensberry (10), en el extremo noroeste. A continuación, y siguiendo la Milla Real, está la torre Cannongate (11), un hito cuya volumetría presenta cierto movimiento.
La L está conformada por tres edificios, que definen un componente más o menos ortogonal enfrentado a la ciudad. Comenzamos por el más regular de ellos, la mansión Queensberry (10), en el extremo noroeste. A continuación, y siguiendo la Milla Real, está la torre Cannongate (11), un hito cuya volumetría presenta cierto movimiento.
Perpendicular a la Queensberry se hallan las oficinas de los parlamentarios (9).
Al interior, es decir a espaldas de la Queensberry hay un espacio interesante, el Garden Lobby (8), que brinda luz al interior de los edificios. Contiguo al Lobby una serie de torres en forma de hoja albergan los servicios para los parlamentarios (4, 5, 6 y 7) cuya orientación es básicamente hacia el suroeste, y frente a ellos se ubica el impresionante hall de los parlamentarios, coronado por un grupo de claraboyas que parece haber estallado en una composición fractálica. En el lado este se encuentran los edificios más importantes, la torre de la prensa (1) y la Cámara de debates (2), y ante ellos, hacia la calle, se halla una pérgola que invita a relacionar al edificio con el exterior.
Hacia el lado sur, una serie de jardines paisajísticamente trabajados por Miralles se diseminan hacia el Arthur's Seat.
LA TORRE DE LA CÁMARA.
Es la torre más importante es la que ocupa la cámara legislativa, cuyo nivel bajo es también la entrada al edificio y el área pública. Aquello también supone un simbolismo claro: la base de los representantes es el pueblo que los eligió.
Tras pasar la zona de seguridad, ingresamos a un área de exposición, restaurante y tiendas, caracterizada por tres bóvedas acabadas en hormigón, decoradas con cruces en bajorrelieve (simbolizando la Cruz escocesa de San Andrés)
Trascurrido este espacio, me encuentro con un impresionante lobby de múltiple altura que precede las escaleras que conducen a la Cámara de Representantes.
Este staccato de ventanas de marco de madera, formando secuencias escalonadas, son una referencia a las fachadas de las casas circundantes que mencionáramos.
Dramático, poderoso pero acogedor, ya que nos presenta una escalera que se abre generosa invitando al visitante, este importante y trabajado espacio deja ver las rotundas columnas inclinadas que conforman la fachada interior de la torre de la cámara.
Pero a pesar de lo sugestivo y trabajado de este espacio, no podría prepararme para la espectacular experiencia que supone la cámara en sí.
Miralles y su equipo prefirieron una distribución de la cámara en forma de hemiciclo, menos confrontacional que la cámara de la casa del Parlamento en Westminster, Londres, en que los asientos se hallan frente a frente. En el hemiciclo escocés se encuentran los asientos diseñados por Miralles, sencillos pero elocuentes, referentes de la hoja y las ramas.
Alrededor en la pared me llamaron la atención una serie de botellas talladas en la pared. El guía nos explicó que aquellas “botellas” representaban gente que observaba a los parlamentarios.
Alrededor en la pared me llamaron la atención una serie de botellas talladas en la pared. El guía nos explicó que aquellas “botellas” representaban gente que observaba a los parlamentarios.
En torno del hemiciclo están los asientos del público. Un gesto realmente importante es que el espacio se encuentra totalmente vidriado, relacionando a la cámara con el paisaje que la rodea, a diferencia de Londres, que se encuentra lo más aislada posible. Las estupendas visuales del recinto además del material elegido (madera) le dan calidez al espacio.
Pero sin duda lo más impresionante de la cámara es la cubierta, un esqueleto de vigas de roble y articulaciones de acero reminiscentes de la estructura de madera del Parlamento original, típico en las estructuras inglesas y escocesas. La impresionante escultura permite cubrir una luz de 30 m sin apoyos intermedios.
EL JARDÍN-VESTÍBULO
Otro espacio interesante es el que se halla adosado a la Casa Queensberry, llamado Garden Lobby (Jardín-Vestíbulo). Aquí Miralles se inspiró en los botes frecuentemente tirados en las playas escocesas. En este espacio vidirado con superficies recubiertas de acero inoxidable la sensación espacial, la originalidad de estas formas y la calidad de la luz dispersa indirectamente son realmente sobrecogedoras. Así lo han entendido los propios usuarios, pues es aquí donde se reciben a autoridades y dignatarios, actividad apoyada por los equipamientos contiguos al jardín, como comedor, bar, estares y otros sevicios.
OFICINAS DE LOS REPRESENTANTES
Una barra larga alberga las oficinas de los 129 parlamentarios. Cada oficina tiene un área de 15 m2, pero lo más destacado de estas oficinas es sin duda una “Cápsula para pensar”, adosada al exterior de cada recinto.
La posición de cada una de estas cápsulas que generan la fachada Oeste ha sido cuidadosamente planificada para que, desde una pequeña ventana hacia el sur, los parlamentarios siempre estén en contacto visual con las montañas volcánicas. Yo no sé si los parlamentarios irán a sentarse a meditar allí a menudo, pero sí sé que algunos se han quejado de que esta forma dificulta el ingreso de luz a la oficina.
Estos elementos, visibles desde la fachada han sido también inspirados en las formas escalonadas y la parte superior en V es una referencia a las piernas del reverendo en la famosa pintura del artista escocés Henry Raeburn, The Skating Minister.
Otro elemento importante, esta vez dando hacia el interior del complejo es una enorme caja de cristal forrada en una celosía en madera y que se extiende en voladizo de 10 metros sobre el Garden Lobby. A ese lado también hay un juego de canaletas de lluvia que atraviesan la fachada en diagonal.
OTROS ELEMENTOS SIGNIFICATIVOS.
Otro elemento llamativo recurrente es una pantalla de granito que su ubica frente a las ventanas, y que significa “una cortina recogiéndose”.
Además, las rejas y otros elementos recuerdan a la escuela de Glasgow, personalizada por el genial Charles R. Mackintosh.
CONTROVERSIA
Miralles murió de un tumor cerebral antes de que culminase el proyecto, en julio del 2000, ay en octubre de ese año falleció también el principal gestor del proyecto, Donald Dewar. El edificio fue además bastante polémico, ya que su intrincada arquitectura devino en un abultado incremento de su presupuesto (en realidad eso también ha ocurrido en grandes proyectos como la Ópera de Sídney o el Centro Getty). Algunos incluso han planteado su demolición. Resulta anecdótico comprobar cómo uno de los edificios más aclamados por la crítica arquitectónica y ganador de muchos premios es a su vez poco popular entre parte de la población. Conversando con gente local, he encontrado a quienes odian al edificios como a quienes están muy orgullosos de él.
Pienso que con el tiempo, el edificio se convertirá en un símbolo, como lo es la Torre Eiffel en París, la Casa Milà o la Iglesia de la Sagrada Familia en Barcelona, crudamente criticadas en su época y hoy reconocidas como símbolos de sus ciudades.VER TAMBIÉN
- ARQUITECTURA DE ENRIC MIRALLES
- TECHOS ESPECIALES EN MADERA
14 comentarios:
Querido amigo, difiero de tu parecer sobre este edificio. Dudo mucho que con el tiempo se convierta en símbolo de la ciudad, al menos símbolo de arquitectura.
Dista mucho de edificios como los que mencionas: La casa Milá, la Torre Eiffel, la Sagrada Familia.
Si creo que será recordado como uno de los tantos fiascos que nos deja ese afán de hacer arquitectura sólo conceptos, símbolos, metáforas... soportado por un elevadísimo presupuesto, bajo el manto de innovadores materiales.
Quizás lo que sí suceda es que terminen demoliéndolo o colocando un cartel de "se vende" como hace un tiempo vi en un edificio del también "famoso" Gehry.
Saludos y felicitaciones como siempre por las publicaciones y el afán de compartir lo que tus privilegiados ojos ven con el resto.
Con el afecto de siempre,
Aldo Facho
¡Aldito! Qué gusto recibir un comentario tuyo, que aprecio bastante no sólo por venir de un arquitecto tan analítico como tú, si no que al vivir en Barcelona has tenido la oportunidad de gozar (¿o sufrir?) varias obras de Miralles y estudiarlas con detenimiento.
No te falta razón en el asunto del presupuesto, que alcanzó a ser 10 veces el original, y es cierto que por llenarse en simbolismos, el edifico pierde en funcionalidad, que es algo que debería haber sido una preocupación importante en un edificio de esta relevancia, magnitud y costo.
Encuentro también interesante el artículo que publicas en tu blog sobre Ferrater y los edificios símbolo.
Pero por otra parte, me conmovió el extremo detalle en cada elemento, desde las columnas hasta los asientos, y el esfuerzo del arquitecto en tratar de hacer una obra escocesa a su manera.Es una obra en la que se puede percibir el cariño del arquitecto por modelarla casi a mano, sacada de la tierra. A su favor diré también que la cuetión ambiental ha sido trabajada con cuidado y en ese sentido es un edificio eficiente.
Personalmente me daría pena que lo demuelan, pero si es que lo vendieran por partes, tal vez me anime a comprarme una Cabina de Pensamiento para ponerla en mi jardín, e irme ahí a meditar sobre la buena vida y la poca vergüenza.
Un fuerte abrazo y si de casualidad vas a Perú por las fiestas, me gustaría mucho encontrarme contigo.
Carlos, coincido con Aldo.
El Seagram Building de Mies, el Capitolio de Chandigarh de Le Corbusier o el MASP de Lina BoBardi, por citar algunos, son los edificios de nuestra era que se convirtieron en íconos para sus ciudades no sólo por la cuidadosa elaboración que tuvieron, sino por lo expresivo de sus materiales y composición formal. Éste es el tipo de edificios que realzan las ciudades, como buena obra de arquitectura (y no de escultura o decoración).
Sin embargo, la composición que muestra la foto del detalle que contiene las rocas de Escocia es realmente bella, me hace recordar a la poética usada por Le Corbusier.
A propósito de la venta, yo me llevaría la caja de celosías.
Gracias por toda esta información que nos muestras, seguimos con atención tu blog.
Te invitamos a visitar el nuestro blog:
laboratorioarquitecturaperu.blogspot.com
(Hemos incluido un link hacia el tuyo)
Saludos desde Trujillo Perú.
Gracias Yván.
Creo que los ejemplos que propones son válidos, aunque también mencionaría los casos de Bilbao, Sídney y Dubai como ejemplos de ciudades que escogieron edificios escultóricos como sus símbolos.
En fin,creo que ambos puntos de vista tienen argumentos que proponen un debate interesante. En todo caso, el propósito de este blog, más que emitir un juicio de valor personal, es ofrecer información recogida de cerca, tratar de establecer las circunstancias que influyeron en cada proyecto y recoger lo que cada edificio tuvo que decir en el determinado momento de su concepción y ejecución. Las ciudades a menudo han superpuesto diversos componentes (a veces contradictorios) de acuerdo a su propia cultura, paisaje y coyuntura histórica. De allí que aquí se cubra un rango amplio de épocas, estilos y lugares, pues pienso que todo ellos tienen algo que decir.
Espero que esa información, más mi propia impresión al recorrer estos sitios sirva al lector para emitir sus propios juicios.
Te agradezco también por presentarme a tu blog, es todo un descubrimiento y por supuesto ya está también en mi blogroll y mi reader.
Un abrazo
aproposito de este arquitecto polemico quisiera invitarlos a leer un articulo que me parecio muy bueno, sobre enric miralles y giusepe terragni.
el blog se llama diverciones y el tema: INTENCIDAD .ojala lo disfruten ,porque me parecio muy bueno chau.
¡Intensidad! Qué palabra tan precisa para definir esta obra. De alguna manera me siento identificado con el art[iculo pues yo fui educado en el racionalismo de Le Corbusier, Meier y Ando, y siempre miramos al deconstructuvismo despectivamente... claro, eso fue antes de Koolhaas, de Herzog & De Mouron, de Libeskind que le han dado a una concepción más profunda.
Pero sí, en el Parlamento puede percibirse la intensidad por todos lados, una intensidad febril que explota hasta en los detalles.
Intensidad, de Pedro Martín García. ¡Cómo quisiera yo poder escribir así!
Carlos, muchas gracias por comentar en mi blog! Si, es tal cual como decís. Lo raro es que entre latinoamericanos hay diferencias, pero en el exterior (me tocó vivirlo en México y en Europa) al encontrarnos con otro latino, nos hermanamos profundamente.
Un saludo grande!
QUE BUENO QUE TE GUSTO EL ARTICULO SOBRE: INTENCIDAD
YO TAMBIEN QUEDE SORPRENDIDO Y ATRAPADO POR ESTE ARTICULO.
TU TAMPOCO TE QUEDAS ATRAS ALA HORA DE ESCRIBIR, YA SEA EVOCANDO A GRANDES ESCRITORES COMO BORGES (UNA CASA DE TE ) O LA DESCRIPCION PRECISA DE LOS ESPACIOS INTENCIVOS (TERMINAL MARITIMA DE YOKOHAMA).
ME LLAMO JHONNY Y SOY UN "SEGUIDOR" DE TU BLOG
UN SALUDO.
Wow! Me siento realmente honrado... muchas gracias, me has alegrado el día.
Saludos!
Yo no soy fan de Miralles desde que un día en clase nos enseñaron un mirador metafísico suyo, pero hay cosas que sí, y esta tiene que ser una de ellas, aunque falle en muchos conceptos como apuntais en otros comentarios, que pase a la historia o no, el tiempo lo dirá :)
"pues yo fui educado en el racionalismo de Le Corbusier, Meier y Ando, y siempre miramos al deconstructuvismo despectivamente... claro, eso fue antes de Koolhaas, de Herzog & De Mouron, de Libeskind"
Respecto a eso, yo pienso que no es tanto en lo que nos educan, sino a lo que nosotros mismos tendemos; y en todo tipo de arquitectura se pueden ver muchos rasgos, pero las clasificaciones fallan para mí. Y eso a lo que tendemos es independiente de clasificaciones como esas xD
O al menos ando con cierta clarividencia últimamente que me ahce pensar así ^^'
por cierto, muy impresionante tu blog :D
A mí si me gusta mucho Miralles y en particular esta obra me encanta. Yo si creo que la arquitectura debe reflejar el sitio donde está y que debe tener simbolismo. Esta obra siempre me ha parecido facinante aunqe no conocía todo el simbolismo que tenía detrás. Muchas gracias por darte el trabajo de compartirlo co nosotros.
Un gran saludo desde Bogotá, Colombia.
Adriana
La arquitectura es sin duda un arte que no muchas personas pueden tener, me gustan mucho tus blogs porque presentan verdaderas artes de arquitectura.
Muy buena tu mirada! Estoy trabajando con esa obra para una exposición de la facultad y me sirvió mucho. Gracias
Publicar un comentario